Ritual para sentirte especial y preparar un spa en casa
Muchas mujeres esperamos a que llegue un día especial, como un cumpleaños o el día de las madres, para sentirnos muy queridas por nuestras familias, pero debemos darnos cuenta de que podemos sentirnos consentidas todo el año. Es más: creo que es una necesidad aprender a cuidarnos y a poder relajarnos después de un día muy intenso y ajetreado. Aunque no cambiaría el ser madre por nada, la verdad es que no es nada fácil, especialmente cuando tienes que cumplir múltiples responsabilidades. Siento que termino de trabajar para servir de chofer de mis hijos y después me pongo a estudiar con ellos, ya que toca hacer las insoportables e interminables tareas escolares.
Por eso quiero invitarte a que te hagas un tiempo para ti misma para que puedas consentirte. Te ayudará a ser más feliz y una mejor mamá.
Cómo hacer de tu baño una experiencia tipo “spa”
Aquí tienes varios consejos para crear tu propia experiencia de spa en casa:
- Separa un tiempo para ti. Puede ser cuando los niños ya se hayan dormido. Silencia tu celular o móvil.
- Prepara un baño y pon cerca de la bañera una bata o toalla.
- Baja las luces; puedes encender velas, ojalá aromáticas. La lavanda ayuda a relajar.
- En el agua de la tina agrega un gel de baño con un aroma relajante, como el Neutrogena Rainbath Shower and Bath Gel, que no deja residuo y huele delicioso. Hay varios aromas, pero mi favorito es el Pear and Green Tea (pera con té verde).
- Si tu piel está muy reseca, agrégale unas gotas de aceite para el cuerpo, como Neutrogena Body Oil.
- Quítate todo el maquillaje y aplica una mascarilla o crema hidratante para el rostro.
- Ayuda a crear un ambiente aún más relajado poniendo música. Puedes poner tus canciones favoritas o buscar en Pandora o Spotify canales con melodías tranquilas que ayuden a relajarte.
- Métete a la tina y cierra tus ojos. Si te cuesta mantenernos cerrados, puedes usar un antifaz para obligarte a desconectarte.
- Cuando salgas de la bañera, hidrata tu piel cuando aún está húmeda con un aceite como el de Neutrogena para que te quede súper suave y estés lista para irte a dormir.
Este ritual es mucho menos complicado de lo que parece y verás que te caerá de maravilla. Es más: ¡no necesitas ser mamá para poder disfrutarlo! ¿Te animas?
Nota: este artículo es parte de una colaboración con Neutrogena pero todas las ideas y fotos son mías.