Una mujer de verdad se hace, no se nace
Una mujer de verdad para mí es una fuente de inspiración constante por su fuerza interior, integridad y valentía. Conozco tantas mujeres que han sabido enfrentar hasta las pruebas más duras y que luego se hacen el tiempo para siempre ayudar a quien lo necesita, ya sea ofreciéndole una palabra amable, una sonrisa o su cariño.
Así como dicen que caminante no hay camino sino que se hace camino al andar, creo que una se va haciendo mujer con cada desafío que enfrenta y lograr superar. Si no logras aprender de las lecciones duras de la vida ni descubres cómo levantarte después de que te caes, entonces seguirás siendo una niña y no una mujer, sin importar la edad que tengas. En ese sentido una mujer de verdad se hace, no se nace. Por eso encuentro tan buena la última campaña de L’Bel, que me ha inspirado a compartir mi propia historia.
Creo que la primera vez que me sentí como mujer de verdad fue cuando decidí ir contra los deseos de mi papá y me cambié de universidad para estudiar periodismo en Chile. Él me dijo que era mejor ser cabeza de ratón que cola de león; yo prefería dar el salto y ser parte del león para siquiera aspirar a llegar a la cabeza del rey de la naturaleza. Terminé graduándome con honores y galardonada con el premio a la mejor alumna.
Luego dejé atrás a mi familia en Chile para forjarme un nuevo camino en Miami. No fue fácil y el primer año fue bastante duro, pero nuevamente me hizo ser una mujer de verdad, independiente.
Sin embargo, si realmente soy sincera, no me sentí cien por ciento mujer de verdad sino hasta que logré ser mamá de mis dos milagros, mi hijo y mi hija. Ellos me inspiran cada día, me alientan a ser una mejor persona y me enseñan lo que realmente vale la pena en la vida. No solo me siento una mujer de verdad, sino que me siento una mujer plena. La maternidad no es lo que define a una mujer, pero en mi caso, era parte imprescindible de lo que quería lograr en mi vida.
No soy la única que siente eso. Mira el video de Alessandra Rosaldo.
¿Qué te hace a ti especial, única y una mujer de verdad? Comenta aquí en mi blog o en las redes sociales con la etiqueta o hashtag #unamujerdeverdad.
Nota: este artículo es parte de una campaña patrocinada por L’Bel.